lunes, 7 de julio de 2008
Evita bailaba con Freud
Si todas las mujeres de alguna forma somos siempre Eva, todas las argentinas somos siempre Evita. En este blog esta Evita toma el sol como Eva. Publicar una entrada es dejar tus pensamientos al desnudo y si acaso recibís atención al exponerlos al mundo es como sentir ese ardorcillo inconfundible por el que recordás porqué ese astro es el astro rey. Hoy empiezo este tour de verano en esta playa nudista llamada blog, pudo haberles tocado una sirena exibicionista de las que sí se ponen en bolas y no abusan de las metáforas y a mí seguramente que me pudo haber tocado un público más participativo, pero así nos va, basta por hoy, no vaya a ser que me dé por psicoanalizarme yo misma, esto de ser cholula de Freud no paga...
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10 comentarios:
No es mi primer sábado en años. Este 2 de febrero tampoco aparecí porque estaba fuera del país y no alcanzaron a conversar conmigo sobre las graves implicaciones de mi editorial "Razones para legalizar las drogas" (que terminé publicando poco tiempo después, con leves modificaciones). Pero no publiqué este sábado por razones de cierre de edición. Volvemos este sábado, a seguirla. Tú escribes bien y no debería en tu bitácora estar colgado esa única entrada (un interesante abrebocas de todas maneras) sino que deberías seguir tomando el sol en público, para solaz del vecindario (de eso iba la buena de Eva, aunque el vecindario se pierda -o precisamente para que se lo pierda- el Real Madrid-Benfica)
Cristi, si no es porque le pones un comentario al Flores no me entero de que ahora tomas sol yucha en público, ja, ja
Supongo que podemos tener alguna tertulia en esta playa nudista ¿o sólo aceptas hombres? seguro que no, por cierto ¿cómo vas con el Sergio?
Besos flaca,
Martina
Xavier: gracias por la amable explicación y el inmerecido piropo, sin entrar en más detalles diré que necesitaba el estímulo y que tal, ahora sos deudor solidario de la comunidad cibernética porque atormentaré a cualquier desprevenido visitante de mediano buen gusto con mis periódicas e impúdicas exposiciones.
Tina: Gracias por dejar un recuerdo de tu visita, al principio pensé en decirte algo así como ¿qué son esas preguntas
piba? pero ahora creo que me has dado una gran idea.
Besos guapos,
Ahora noto que el comentario que publiqué en mi bitácora es (para goce propio y ajeno) extemporáneo. Asumo, en todo caso, que ser deudor solidario de las deudas principales que pagará Evita con su exposición al sol es todo un detalle. Enhorabuena. Salú.
Creo que todos somos voyeristas por naturaleza, el morbo es algo propio del ser humano, así que como MPI (morboso plenamente identificado) te pido que sigas tomando sol en público, que somos muchos los que queremos verte y por supuesto evitar tener que enterarnos de tu existencia por información del degenerado de Xavier.
Xavier como siempre halagada de que te detengas por acá. No dejes de hacerlo.
Fernando mucho gusto, espero disponer de una dirección para devolverte la morbosa visita en breve...
Como no pensar en una mujer argentina, me imagino lo interesante que sería conocer a una tropicalizada (aunque en tu caso Quito es primavera eterna), esa magia que solo ellas tienen, su caminar, flacas, con zapatillas Jonh Foods (así se escribe?), con su conflicto, sus años de terapia, el rivo en las noches, la histeria, el amor, los besos que saben alfajor, el amor imposible, el de la Fac, el del laburo, las del interior, las porteñas, la general Paz, la mina que toma un colectivo a la una de la madrugada para irse a bailar, la que reniega de ir en el roca a las 18 horas, la que toma el sol en verano a las “7 de la tarde”, la magia de Rosario, el Cairo, el monumento a la bandera, granizo, sol, la vista al Paraná me parecía muy similar a la que se ve desde el malecón al rió Guayas, si cocinas boga un día de estos avísame o si te animas a dar clases para bailar cumbia santafecina por favor..
Seguro Sabina estaría también con Correa pero la verdad yo le dejo la política a los políticos. Nebot me parece patético pero no te imaginas como estaba Guayaquil antes de los adoquines, seguro no lo entenderías por que no estabas aquí o lo que es entendible no vives aquí.
Anónimamente tuyo,
Guayaquileño de San Telmo
Anónimamente mío ¿qué te puedo decir? Los hombres de Guayaquil, orgullosos supervivientes de otras eras, galantes, protectores, posesivos, infieles, si son de alcurnia te tratan de impresionar en el Club de la Unión, el Tennis o el Bankers, si son proletarios te invitan a pasear por el Malecón y Las Peñas, pero en ninguno de los dos casos sos libre en el sentido que lo sos en una novela de Saramago. Guayaquil siempre en carro, imposible recorrerla a pie en el día, el calor y la humedad te derriten, imposible recorrerla a pie de noche, los peligros acechan, las bicicletas son objetos circulantes no identificados. Guayaquil, la vida fluye a través de sus centros comerciales, el Monumental, el Capwel, la Víctor Emilio, la 9 de octubre, la zona rosa, la burbuja. Menestra, ceviche, encebollado para el chuchaqui, el universo de los domingos, la salsa erótica, la temporada de playa, las misas masivas, los matrimonios de sábado en la noche, el crecimiento horizontal, y el río, siempre el río. Si renunciás al anonimato y concentrás tus bien logradas letras en un solo sitio alguna vez, hacémelo saber.
Conocí Guayaquil en 2002, 10 años después del infame roldosismo, pero mi familia es de allá, es como si lo hubiera vivido... y aún así no es pretexto, la obra pública y la inclusión social no son mutuamente excluyentes.
Si el arroz no ha hecho efecto en ti debes de ser un bombón, escribes muy bien, difiero en como concibes a Guayaquil difícilmente podrás tener una visión cercana a la realidad, seguro la ciudad de la que hablas es de Guashaquil, porque Guayaquil a pesar de odio de muchos desde el altiplano y no estoy haciendo eco del mediocre discurso de Nebot es y será polo de desarrollo y pulmón de la patria, esto no es Córdova Bs Aires ,ni La paz Santa Cruz no somos ni seremos el pueblito resentido con la capital.
Saludos afectuosos,
El Guayaco
¿Arroz? sólo en el sushi.
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